El umbral
A veces la desesperanza es inevitable y sientes que solo puedes dejarte llevar por ella.
A veces la desesperanza es inevitable y sientes que solo puedes dejarte llevar por ella.
La enfermedad asusta tanto como las secuelas que podemos sufrir después de sanar.
En la esquina de mi habitación, abajo a la izquierda, puedo verte. Agazapada, envuelta en una neblina que no me permite distinguir con claridad tus ojos. Aunque alcanzo a adivinar tus dedos a través de las sombras. Están encorvados, parecen rotos. ¿Te han hecho daño? No sé por qué insisto
Llamadme ilusa pero creo que esto de la psicomatización del estrés o cómo nuestra mente gobierna nuestro nave corporal mientras atraviesa el océano de la vida me parece una solemne tontería. Siempre, siempre, he intentado luchar contra mi estrés, buscar maneras de vivir con más felicidad, he hecho terapia, yoga,